martes, 21 de julio de 2009

Toros del Mundo

TOROS-COLOMBIA


Rejoneadores colombianos cortan cinco
orejas en cierre de feria de Sogamoso



Los rejoneadores colombianos Juan Rafael Restrepo, Willy Rodríguez y Jorge Enrique Piraquive conquistaron hoy cinco orejas en la segunda y última corrida de la Feria del Sol y del Acero de la población de Sogamoso.

Los tres alternaron con Mauro Andrés, también de Colombia, en una tarde soleada y ante una plaza con tres cuartos de entrada que los despidió con una gran ovación.

Los toros de Achury Viejo permitieron éxito rotundo de esta corrida de rejones. Por su movilidad y casta, las reses fueron material propicio para los de a caballo.

La plaza la abrió Mauro Andrés, que pese a su juventud demostró muy buenas maneras en el arte del toreo a caballo, aunque no tuvo suerte con el rejón de muerte. El rejoneador finiquitó de manera sobresaliente al burel, que previamente dio dos volteretas, y escuchó algunas palmas.

La corrida fue continuada por Restrepo, que alegró a la multitud con la brillante ejecución de las distintas suertes del toreo a la jineta. El colombiano dejó medio rejón de muerte, lo que le valió para cortar una oreja.

Luego siguió Rodríguez, que anduvo espectacular con un toro de gran calidad que le permitió ejecutar las distintas y variadas suertes del toreo a caballo, hasta matar de un rejonazo y conquistar las dos orejas.

A continuación actuó Piraquive, que se valió de la bondad y casta de su oponente para redondear una destacada actuación, con toda clase de suertes. El de a caballo acabó con el toro de un certero rejón, por lo que fue premiado con las dos orejas.

Los tendidos presenciaron luego una doble actuación por colleras, primero de Restrepo y Andrés, que ejecutaron todas las variadas suertes del toreo ecuestre con aceptable comportamiento, por lo que dieron vuelta al ruedo al sonar un aviso.

Luego actuaron Piraquive y Rodríguez, quienes estuvieron afortunados por la colaboración del noble de Achury Viejo, que les facilitó una faena de la que salieron aclamados.



TOROS-ESPAÑA-FERIA DE SANTIAGO

Perera y Talavante se esfuerzan, pero sin premio, con mansos de Fuente Ymbro


Los diestros Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante cumplieron sendas y firmes actuaciones en la corrida celebrada hoy en Santander, aunque los dos sin premio por culpa de los aceros, en una mansada de Fuente Ymbro, imposible para hacer el torero, con la que se estrelló también Luis Francisco Esplá.

Se lidiaron toros de Fuente Ymbro, aceptablemente presentados, mansos y "rajados", de nulo juego. Sólo "se dejó" algo más el segundo, aunque fue más por la buena técnica del torero.

Luis Francisco Esplá: tres pinchazos y bajonazo (palmas); y media estocada y dos descabellos (palmas).

Miguel Ángel Perera: pinchazo y estocada (ovación tras petición insuficiente); y estocada (ovación).

Alejandro Talavante: pinchazo, estocada y cuatro descabellos (silencio tras un aviso); y pinchazo hondo, otros dos pinchazos más y estocada caída (silencio tras un aviso).

La plaza se llenó en tarde soleada al comienzo de festejo y con agua en los tres últimos toros.

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PETARDO GANADERO



Esplá, que recibió un homenaje de la afición santanderina antes de comenzar el festejo al ser su última tarde en la plaza de Cuatro Caminos, se encontró en primer lugar con un toro de muy poco fondo, y sólo pudo mostrar voluntad en un variado y lucido toreo de capote, posterior tercio de banderillas, que cumplió con habilidad, y una faena de muleta en la que hubo muletazos sueltos, pero sin unidad.

El cuarto anduvo también falto de fuerzas y de casta, toro con el que Esplá no se dio demasiada coba y abrevió.

El primero de Perera manseó mucho de salida. Un animal incierto, que recortada por los dos pitones, sin humillar lo suficiente y "midiendo" constantemente, pero al que el torero al final hizo embestir por el pitón derecho, inventándose una meritoria faena de mucha firmeza y extraordinaria técnica.

Muy preciso a la hora de dar "los toques" para alargar las embestidas, dejándole siempre al toro la muleta en la cara para ligar el siguiente pase. Y valiente de verdad, pues la quietud fue otra de sus armas. Al natural no quiso el animal, y a vueltas a derechas volvió a la carga Perera con dos tandas en redondo de mucha enjundia. Pero perdió el trofeo al cruzarse un pinchazo antes de la estocada final.

El quinto no le dio ninguna opción. Toro manso en mayúsculas, que salía suelto de cada muletazo, rematándolos además con la cara por las nubes. Perera, sin embargo, le buscó las vueltas, de nuevo en la distancia corta. A base de tesón consiguió algún muletazo suelto de buen aire, pero el conjunto no tuvo redondez. La ovación que recibió, premio al esfuerzo.

Talavante estuvo muy comprometido con su primero, un toro "rajado" a las primeras de cambio, buscando la querencia desde el primer muletazo. Talavante, no obstante, apostó por él toreándole al hilo de las tablas, con templados muletazos por el lado derecho, y, sobre todo, muy ajustados. Emocionante faena, aunque echada a perder por el mal uso de los aceros.

El sexto fue también toro imposible, al igual que el anterior de Talavante, negado desde el principio. Trasteo anodino, que apenas tuvo trascendencia, con poco gente ya en los tendidos debido a la lluvia que caía desde el tercer toro.







TOROS-ESPAÑA-FERIA DE SAN JAIME

Alberto López tiene "algo" para ser torero


Una oreja cada uno cortaron los tres actuantes en la novillada sin picadores celebrada hoy en Valencia, en la que destacó sobremanera el madrileño Alberto López, por su buen concepto y excelente ánimo para hacer el toreo.

Novillos de los herederos de Salvador Guardiola Fantoni, bien presentados y de buen juego.

Jesús Chover, de la Escuela de Valencia: estocada trasera, larga agonía y dos descabellos (dos avisos y ovación tras petición insuficiente); y pinchazo y media estocada (una oreja con petición de la segunda).

Alberto López, de la Escuela de Madrid: estocada y doce descabellos (gran ovación tras dos avisos); y pinchazo y estocada (una oreja tras un aviso).

Juan Cervera, de la Escuela de Valencia: estocada tendida (una oreja); y pinchazo, estocada tendida y cuatro descabellos (aviso y palmas en la despedida).

La plaza se cubrió en más de la mitad de su aforo en tarde de nubes altas y entrada de "puertas abiertas".



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TORERO A LA VISTA

El madrileño Alberto López tiene condiciones para ser torero. Se ve a la legua. Valor y clase definen su estilo, ahí es nada. Aunque lógicamente necesita también corregir algunos defectos, por ejemplo, la excesiva largura -en el tiempo- que imprime a sus trasteos. La espada asimismo es asignatura que tiene pendiente. Pero por actitud y aptitud, está claro que todo lo andará.

Muy completa su primera faena. Lanceó a pies juntos con sumo gusto. Abrió faena de muleta de rodillas con seis pases seguidos, corriendo la mano como si estuviera de pie. Y ya en la vertical, por cierto que torea muy derecho y suelto a la vez, se dio muy buena maña en lo fundamental, improvisando en los remates con los obligados de pecho y otros hermosos adornos. Perdió la oreja al eternizarse con el descabello.

En el quinto fue más demostración de valor, saliendo por los aires en un fuerte golpe por no rectificar en favor del novillo en una especie de "o pasas o me llevas por delante, pero no me quito". Hubo también, no obstante, algún pasaje de buen toreo, de mano baja y sentida.

Está claro que puede funcionar Alberto López. Lo corrobora también el hecho mismo de ser aclamado por los partidarios de los otros dos locales, que al fin y al cabo fueron los que llevaron la gente a la plaza.

Aunque no debió quedar contenta del todo la parroquia precisamente con sus toreros, y ello a pesar de la oreja que también paseó cada uno de los dos.

Chover anduvo con ganas pero con muchas prisas, lo que en el argot se define como bullidor. Y Cervera da la impresión de sentirse muy respaldado, le faltó ambición, demasiado frío. Ninguno de los dos deja abierto compás de espera.

Con la cantidad de jóvenes que esperan una oportunidad como ésta, sería bueno que la empresa y la Escuela Taurina de Valencia, que interviene directamente en la organización, fueran más rigurosos en la selección.



ESPAÑA-SANFERMINES
Estadounidense herido en encierro de los Sanfermines abandona el hospital

El ciudadano estadounidense herido en el encierro de las fiestas de San Fermín celebrado el pasado 10 de julio en Pamplona ha recibido el alta en el hospital donde fue ingresado tras sufrir un traumatismo torácico.

Elías Sánchez, nacido en Texas (EEUU) y de 61 años, sufrió un traumatismo torácico severo con hemoneumotórax, del que fue tratado hasta hoy en el Hospital de Navarra, de la ciudad de Pamplona.

A las pocas horas de recibir al alta y abandonar el hospital, el ingeniero tejano declaró en tono de broma, que su deseo es regresar a Houston para ir al rodeo "a montar un toro".

Cuatro días después de su primera conversación con Sánchez ha mejorado físicamente y se le han retirado los drenajes, "pero aún con dolores", dijo, para agregar que ahora depende de él recuperarse del todo de su percance y "comer bien", para lo que ha adquirido "barritas energéticas" y productos ricos en cereales.

"Mi intención es regresar a Houston el jueves. Estoy un poco preocupado porque la presión del vuelo y las turbulencias puedan afectar a mis heridas, aunque el seguro me va a mandar una enfermera para que me acompañe durante el viaje", explicó.

Universalizada por Ernest Hemingway en su novela "The sun also rises" (1932), traducida como "Fiesta", a los Sanfermines acuden cada año miles de visitantes de todos los rincones del mundo.

Los estadounidenses figuran entre los extranjeros más asiduos a esta cita de Pamplona junto a los franceses, aunque también acuden un gran número de británicos, italianos, alemanes o neozelandeses.

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